La recaudación pública por el impuesto de matriculación, tasa que está transferida a las comunidades autónomas, se situó en 230 millones de euros en el primer cuatrimestre del año, un 25% más que los 184 millones que se habían ingresado en el mismo período de 2022.
Según datos de la Agencia Tributaria, los ingresos públicos por esta tasa se situaron en 50,61 millones de euros en el cuarto mes del año, lo que supone un descenso del 4,3% en la comparativa interanual.
La cuota media que abonaron los conductores españoles por la adquisición de un vehículo en concepto de impuesto de matriculación fue de 737 euros hasta abril, un 1,2% más en comparación con los 728 euros del mismo periodo del año anterior.
En cuanto al precio medio de los vehículos vendidos en España, incluyendo el impuesto de matriculación, en abril se situó en 23.549 euros, lo que supone una subida interanual del 3,5%, mientras que la media en los cuatro primeros meses del ejercicio fue de 23.390 euros, un 6,4% más en comparación con el primer cuatrimestre de 2022.
Si se compara el precio de los coches sin incluir el impuesto de matriculación, la subida en abril asciende hasta el 3,7%, con 22.836 euros, mientras que en los cuatro primeros meses de este año sería del 6,6%, con 22.653 euros.
Los modelos matriculados en España hasta el mes pasado emitían 119 gramos de dióxido de carbono (CO2) de media, tres gramos menos que un año antes, con unas emisiones medias de 118 gramos por kilómetro en abril (122 gramos en 2022).
Al cierre del primer cuatrimestre, el valor total de los vehículos matriculados en el mercado nacional fue de 7.070 millones de euros, un 31,8% de progresión interanual. En abril, la base imponible se situó en 1.620 millones de euros, un 3,3% más que los 1.342 millones de euros del mismo mes del ejercicio anterior.