La unión de las multinacionales ALD Automotive y LeasePlan —que se aglutinarán bajo una nueva denominación comercial a finales de año— propiciará que el 40% de todos los contratos de nueva producción firmados por la compañía se correspondan con flotas de vehículos de turismo eléctricos, según ha asegurado el presidente y consejero delegado de la empresa, Tim Albersen, en una jornada con inversores celebrada hoy.
Si se tienen en cuenta todos los tipos de propulsión relacionada con la electricidad, ese porcentaje aumentará a partir de 2026 hasta el 50% de la nueva producción de la flota propia de turismos de ALD-LeasePlan en la Unión Europea, Reino Unido, Noruega y Suecia.
“Estamos comprometidos de una manera firme a reducir la huella de carbono de nuestras operaciones en todos los mercados en los que operamos”, ha asegurado Albertsen.
El 50% de nueva producción previsto por ALD-LeasePlan supondría un fuerte incremento respecto de las cifras de la multinacional del año pasado, cuando concluyó con un 28% de sus contratos de flota propia asociados a vehículos de turismo electrificados.
Este cambio de chip hacia un modelo descarbonizado de movilidad se traducirá en una reducción de las emisiones de dióxido de carbono de la flota activa de ALD-LeasePlan hasta menos de 90 gramos de promedio por kilómetro recorrido y vehículo a partir de 2026 y en comparación con los 112 gramos de 2022, de acuerdo con las estimaciones avanzadas por la firma francesa.
ALD-LeasePlan, que en la actualidad maneja una flota de 428.000 automóviles eléctricos e híbridos enchufables, dispone de una flota global de 3,4 millones de vehículos gestionados a través de sus flota propia y los contratos de gestión, mantenimiento y servicio que mantiene con terceras empresas.

Los objetivos ecológicos de ALD-LeasePlan se han realizado teniendo en cuenta un próximo auge a corto y medio plazo en la suscripción de vehículos, un modelo de adquisición que reducirá la tradicional forma de compra completa de un coche que se ha producido históricamente por parte de los consumidores.
En este sentido, ALD-LeasePlan considera que las formas de contratación de vehículos a través de renting, renting flexible, alquiler puro y pago por uso crecerán desde los 4,9 millones de automóviles en 2022 hasta 9,5 millones de unidades en 2030, con un crecimiento del 94%, minorando la posición histórica dominante de la compra directa y los préstamos y financiación tradicional para adquirir un automóvil.
Al respecto, ALD-LeasePlan prevé que los 1,4 millones de automóviles adquiridos por medio de fórmulas diferentes de suscripción por Administraciones Públicas y Empresas en Europa en 2022 crezcan un 64% cuando llegue 2030, con 2,3 millones de unidades.
En el caso de las pymes, esta cifra de vehículos suscrito, en renting, renting flexible y pago por uso pasará de los 1,7 millones de vehículos del año pasado hasta tres millones, y en el canal de clientes particulares de 1,8 millones de unidades a 4,2 millones, experimentando el mayor crecimiento.
Reino Unido y la ampliación de plazo al diésel y la gasolina
En otro orden de cosas, y a preguntas de Fleet People, Tim Albertsen se ha referido a la “realidad política diferente” que encierran decisiones como posponer la prohibición de la venta de vehículos diésel y de gasolina desde 2030 hasta 2035, anunciada en estos días por el primer ministro británico, Rishi Sunak.
“Es importante que tengamos targets ambiciosos, pero también es cierto que los plazos para la electrificación se toman su tiempo y que en el caso de los vehículos eléctricos es cara”, ha significado Albertsen, quien ha recalcado la importancia de tener “una visión clara”, en el plano medioambiental ligado a la movilidad.
“Nosotros, por ejemplo y aunque tenemos targets muy ambiciosos, no contemplamos disponer del cien por cien de la flota eléctrica en 2030, pero es clave fijar plazos y continuar con políticas de desarrollo medioambiental potentes”, ha explicado el directivo.