La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha emitido un informe en el que señala que exigir una licencia previa para la instalación de puntos de recarga de vehículos eléctricos en España contraviene la legislación vigente.
Esta conclusión ha sido alcanzada a petición de la Secretaría para la Unidad de Mercado (SECUM), que solicitó el análisis de los posibles obstáculos que frenan el desarrollo de infraestructuras de recarga en el país, encontrando que una de ellas, principal, reside en la solicitud a las compañías del sector de licencia previa, cuando la Ley indica de manera precisa que una Declaración Responsable por parte del instalador titular es suficiente.
Según la CNMC, y al respecto, las Administraciones Públicas solo están autorizadas a solicitar una declaración responsable para la instalación de estos puntos.
Reclamar una licencia o autorización previa, como ocurre en algunos casos, «vulnera el artículo 5 de la Ley de Garantía de la Unidad de Mercado (LGUM), que establece que este tipo de permisos solo pueden exigirse en situaciones muy concretas», como cuando los puntos de recarga se instalan en edificios considerados bienes de interés cultural o cuando la potencia de la infraestructura supera los 3.000 kW, destaca la CNMC.
Denuncia de Aedive
El informe surge a raíz de una denuncia presentada por la Asociación de Empresas para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE), que alertó sobre estas barreras regulatorias.
Esta denuncia fue complementada con los resultados de una consulta pública realizada por la propia CNMC en el sector, que reforzaron la percepción de que las administraciones públicas «podrían estar actuando de manera incorrecta en algunos casos».
Ante esta situación, la CNMC ha instado a las Administraciones a ajustar sus procedimientos para cumplir con la normativa vigente y la regulación sectorial, además de añadir «la importancia de eliminar estos obstáculos para facilitar el despliegue de infraestructuras de recarga en el país», un paso esencial para fomentar el uso de vehículos eléctricos y avanzar en la transición energética.
La CNMC también ha asegurado que la instalación de puntos de recarga es una de las «piezas fundamentales» para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones y transición hacia energías más limpias.
«Cualquier traba injustificada en su desarrollo puede tener un impacto negativo en el crecimiento del mercado de vehículos eléctricos», afirma, y en última instancia, en el «cumplimiento de los compromisos medioambientales del país».