viernes 29, marzo, 2024

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Ceviche de bonito y gambones “Cazafantasmas”

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Los años 80 dieron para mucho en muchos campos. En el cine se vislumbró una corriente de películas comerciales, aptas para todos los públicos que tenían la única y sana motivación de entretener a la sala sin demasiadas pretensiones. He aquí un ejemplo con estos Cazafantasmas, una obra ya icónica, de inmortal banda sonora, que entremezclaba géneros y revestía de “carro de combate” a un Cadillac Miller-Meteor de 1959.

Este vehículo es una pieza fundamental en los grandes “coches de cine”. Imposible no proyectar su imagen mental al pensar en esta comedia fantástica. El ECTO 1 se trataba de una suerte de station wagon, coche fúnebre y ambulancia, donde estos intrépidos y alocados cazafantasmas cabalgaban a la caza de espíritus en Nueva York. Todo empezaba con un Cadillac Miller-Meteor en mal estado, y con el tuneado posterior quedaba ese carismático automóvil blanco (inicialmente era negro, pero se varió para poder rodar de noche) plagado de sirenas y cachivaches, unas rayas rojas para disimular su toque hospitalario y con el famoso logo estampado.

La película aunó a un elenco cómico y popular comandado por Bill Murray, Harold Ramis y Dan Aykroid y supuso un rotundo éxito comercial. Para muchos sigue permaneciendo en la retina como un divertimento máximo, de esos que marcaban infancias. Y el Cadillac Miller-Meteor pasaba automáticamente a ser un objeto de culto… Suena la alarma. Pánico en la ciudad. Mandiles a modo de uniforme. Salimos a cocinar fantasmas.

La plaga asedia la Gran Manzana o la Gran Naranja, en nuestro caso. Así que vamos a ir cortando el copete de la naranja y con ayuda de una puntilla vamos separando con cuidado la carne de la piel, para luego vaciar la carne. Rellenamos la cáscara de hielos para que conserve su forma y al congelador a buen recaudo, a modo de trampa de ectoplasmas.

Cada vez hay más trabajo para estos parapsicólogos y tienen que volar con su ECTO 1 para atrapar espectros de lo más variopintos. Un bol hará las veces de contenedor de espíritus: así que mezclamos el bonito en trozos de bocado, los gambones, la cebolla morada laminada, los gajos de las naranjas en trocitos, el aguacate troceado, el zumo de naranja y de lima —para dar el toque ácido de su humor—, el cilantro picado, sal, pimienta negra y aceite de oliva Virgen Extra. A la nevera durante 30 minutos.

Gozer El Gozeriano acecha…

Pues toda esta invasión es el presagio de la irrupción de un poderoso demonio con ganas de jaleo interdimensional. La naranja helada se transforma en ese edificio de Central Park donde se consumará la gran batalla. Picamos el hielo y los colocamos como base para simbolizar la imagen blanca del Viajante, en forma de muñeco de los Marshmallow.

Hora de cruzar los rayos y materializar la odisea. Sólo así podemos consumar la salvación del plato y ya puestos, de la Humanidad.

Disponemos la naranja helada. La rellenamos con cuidado con nuestro ceviche. Espolvoreamos un poco más de cilantro por encima. Y de pronto la explosión, la victoria. Sabores cítricos, frescos, picantes se desparraman por tu boca y por la azotea ante el júbilo popular.

Los cazafantasmas se dan un baño de popularidad. Cargan de nuevo los artilugios en su Cadillac Miller-Meteor y se alejan con la sensación del deber cumplido y el plato hecho. Se avecinan secuelas y remakes. Y el ECTO 1 aparecerá siempre donde haya un ectoplasma, un demonio, un semidiós gamberro o un espectro moqueante, haciendo rugir su peculiar y emblemática sirena.

Seamos sinceros, si ves un fantasma…

… Who you gonna call?

 


Ingredientes (2 personas)

250 grs de bonito descongelado, 12 gambones , 2 naranjas grandes (aprovecharemos todo), 1 aguacate, 1 cebolla morada, Cilantro fresco, 2 limas, 2 naranjas, Sal y pimienta negra molida, Aceite de Oliva Virgen Extra, Hielo pulverizado (presentación)

 

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