La entidad financiera Caixabank ha anunciado que propondrá a sus 38.000 clientes de renting una demora en el pago de las cuotas mensuales de sus vehículos durante los próximos tres meses de abril, mayo y junio.
Esta medida, que será articulada en la práctica gracias a la colaboración de Arval Service Lease, el ‘partner’ de renting de Caixabank, persigue ayudar a autónomos, empresas y clientes particulares ante los potenciales problemas de liquidez derivados de la crisis de Covid-19.
La moratoria en el pago propuesta por CaixaBank se activará de modo automático a través de internet, mediante el aviso personalizado a cada cliente de renting del grupo, una actividad en la que Arval tendrá bastante protagonismo.
Caixabank ha sido, durante los tres últimos años, uno de los actores principales de España en la ofensiva por captar la nueva ola de clientes particulares ávidos por el renting de coches.
Hay que decir que, de aceptar la propuesta del banco, el cliente que quiera recibir dicha moratoria en el pago tendrá que ampliar en seis meses el contrato de renting que tenga firmado.
También hay que reseñar que solo podrán acogerse a este aplazamiento clientes sin deuda previa y con un vencimiento superior a tres meses.
De acuerdo con datos recabados por Fleet People, Caixabank concluyó el ejercicio pasado con un volumen de unas 15.000 operaciones nuevas en renting.
A comienzos de este ejercicio y antes de que surgiera la crisis del coronavirus, el banco que preside Jordi Gual tenía apalabrados más de 12.000 vehículos en diferentes campañas mensuales para todo el ejercicio, la primera vez que efectuaba una promoción específica cada mes.
A esta cifra habría que sumar las operaciones de renting convencionales extracampaña del grupo.
El ‘push’ del renting para clientes privados está siendo tan potente que durante el primer trimestre del año, por ejemplo, una única operación firmada entre Seat y Caixabank ha situado a este SUV como el más vendido actualmente en renting en España.