La industria y empresas de automoción que operan en España han dado un golpe en la mesa y han reivindicado su elevada influencia en la economía y sociedad durante la presentación de Automobile Barcelona, el Salón del Automóvil, que este año celebra su centenario en una edición que tendrá lugar entre los próximos 11 y 19 de mayo en Montjuic.
“Será el acontecimiento automovilístico del año en España. Automobile es un salón que mira al futuro y que tiene lugar en un contexto económico que invita al optimismo. Hemos recuperado la mayoría de marcas de vehículos y tendremos récord de compañías, pero también de superficie expositora”, según adelantó el directivo Enrique Lacalle, presidente de Automobile Barcelona.
Durante la edición actual que tendrá lugar en mayo, un total de 38 marcas de automóviles han confirmado sus asistencia al evento, y se ha rehabilitado un pabellón y una zona que dejó de utilizarse en la última muestra.
Con tres áreas de interés fundamentales —Motoshow, Connected Street y Centenario—, Automobile Barcelona 2019 está negociando en este momento la llegada del grupo automovilístico PSA a la cita (conformado por las firmas Peugeot, Citroën, DS y Opel), en tanto que Ford, Dacia y Mahindra no participarán, finalmente.
El área ‘Motoshow’ congregará las novedades de las marcas de automóviles y enseñará a los asistentes la transformación tecnológica del sector, por ejemplo a través de la conducción autónoma y la movilidad inteligente. De su lado, ‘Connected Street’ servirá para que los visitantes del Salón prueben en directo todas las novedades, y ‘Road to 100’ exhibirá la historia del centenario del Salón del Automóvil de Barcelona y mostrará la estrecha relación existente entre la ciudad condal y el desarrollo de la industria automovilística en España.
Se da la circunstancia de que Automobile Barcelona, que coincidirá con la celebración del Gran Premio de Fórmula Uno de Montmeló, está considerado como Acontecimiento de Interés Público y así ha sido reconocido ya en los presupuestos Generales del Estado de 2018, lo que se traduce en que tanto patrocinadores como participantes podrán deducirse hasta un 90% de los gastos originados en el evento.
“Es, sin duda, un aliciente más para las empresas que nos acompañarán en el evento”, apuntó ante los periodistas Enrique Lacalle, quien también destacó que “este será un evento muy comercial, muy familiar y muy visitado”.
ANFAC: “Algunos se han olvidado de la industria”
José Vicente de los Mozos, presidente de la Asociación Española de fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), formó tándem en la presentación de Automobile Barcelona con Enrique Lacalle, y en su alocución abundó en la idea de que la industria y las empresas de automoción españolas deben de ser consideradas con la importancia que merecen dado su peso en la economía nacional.
“Parece que a algunos se les ha olvidado lo que representa la industria de automoción en España, que suma el 10% del PIB y proporciona trabajo a 400.000 personas de modo directo, 20.000 de ellos en los últimos cinco años y con una característica esencial: que son empleos de calidad, cualificados y estables”, remarcó el también presidente de Renault España.
De los Mozos significó la idoneidad de Automobile Barcelona como un espacio de muestra de automóviles “perfecto como altavoz para la industria. Es una gran oportunidad para tocar los vehículos del futuro, pero también para mostrar tranquilidad a los compradores de coches, porque tenemos mucho futuro”, aseguró.
El ejecutivo solicitó que son precisamente los visitantes y consumidores de eventos como Automobile Barcelona, y la sociedad en general, los que deben recibir un claro mensaje de tranquilidad en relación con la industria del automóvil y con los vehículos. En este sentido, De los Mozos lamentó los mensajes equívocos y difusos que se están dando a la población desde las diferentes Administraciones Públicas, lo que está ralentizando tanto las decisiones de compra de automóviles como el tipo de vehículo elegido.
“La debilidad del mercado en los últimos meses se debe a la incertidumbre del consumidor, que ya no sabe qué comprar. ¿Diésel? Me lo prohíben; ¿Cero emisiones? No tengo infraestructura de recarga” —ejemplificó el presidente de Anfac—. “Y luego están los diferentes escenarios de circulación. Aquí se puede, aquí no. Hay que centrarse y dar confianza al consumidor”, alertó José Vicente De los Mozos, quien advirtió de que “una transición ecológica muy rápida puede poner en peligro a la industria de automoción española. La confusión es muy peligrosa”, sentenció.