El fabricante alemán de automóviles Audi y el constructor chino de automóviles SAIC Motor han formalizado un acuerdo de cooperación, a través de la firma de un memorando de entendimiento estratégico (MOU) por el que ambas firmas se han comprometido a desarrollar de modo conjunto una serie de vehículos eléctricos (EV) inteligentes de alta gama.
Estos vehículos serán construidos por medio de una empresa conjunta denominada SAIC Audi, que además permitirá que trabajen en el desarrollo mutuo de la que han denominado como plataforma digital avanzada, que dará lugar un primer automóvil con estas características premium en el mercado en 2025.
SAIC y Audi unirán sus recursos para crear una gama de modelos eléctricos, acelerando el proceso mediante la mejora de la eficiencia en investigación y desarrollo, y optimizando los procesos de desarrollo, según ha explicado SAIC en un comunicado de prensa.
La compañía ha explicado que los nuevos modelos que se desarrollen estarán equipados con los componentes de hardware y software «más avanzados del sector, ofreciendo un rendimiento eléctrico de clase mundial y una experiencia de interacción inteligente más fluida y amigable».
Volkswagen también tiene partner
Audi, por su parte, contribuirá a esta alianza con su experiencia en la definición de productos, el desarrollo de vehículos e ingeniería para modelos premium, mientras que SAIC aportará innovaciones en el apartado del vehículos eléctrico inteligente y conectado.
Audi y SAIC, que son partners desde hace años en China, ya firmaron un principio de acuerdo a mediados del ejercicio pasado que sentó las bases del acuerdo recién alcanzado, con el objetivo común de expandir su cartera de vehículos eléctricos en el mercado premium y con la idea esencial, en el caso de la firma de los cuatro aros, de lanzar nuevos productos en China en segmentos en los que no está presente actualmente.
Hay que indicar que, en una misma línea temporal, la marca Volkswagen, también perteneciente al grupo Volkswagen, ha anunciado un acuerdo con Xpeng para invertir cerca de 700 millones de dólares en el fabricante chino de vehículos eléctricos, lo que permitirá controlar el 5% de su capital y con el propósito de fabricar dos modelos eléctricos de tamaño mediano de la marca de la doble uve en China a partir de 2026.