La empresa de movilidad y ‘renting’ de vehículos Arval cerró 2023 con un beneficio neto atribuido de 1.379 millones de euros, un 15,2% más que los 1.198 millones de euros del ejercicio anterior, según los resultados publicados por la compañía.
La facturación de la compañía entre enero y diciembre de 2023 fue de 16.096 millones de euros, un 22,9% más que los 13.097 millones de euros registrados en el conjunto del año anterior.
«Este excelente desempeño refleja el crecimiento del negocio de Arval y demuestra el éxito de su modelo de arrendamiento a largo plazo, así como la diversificación de su base de clientes, de las áreas geográficas en las que opera y de sus productos», ha destacado la compañía en un comunicado.
Por segmentos de negocio, el alquiler de vehículos supuso una facturación de 6.183 millones de euros, un 19,5% más en términos interanuales, mientras que los servicios se situaron en 4.877 millones de euros, un 24,5% más que los 3.917 millones de euros de 2022.
Los ingresos por la venta de vehículos y comisiones por finalización de contratos se situaron en 5.035 millones de euros al cierre del pasado ejercicio, un 25,8% más que los 4.003 millones de euros del ejercicio previo.
Por otro lado, el beneficio bruto operativo de Arval en 2023 se situó en 2.906 millones de euros, un 16,7% más que los 2.489 millones de euros de 2022.
El presidente y consejero delegado de Arval, Alain van Groenendael, ha destacado el «buen desempeño» del año y el aumento del 6,9% en la flota financiada de Arval, hasta los 1,7 millones de vehículos.
«En 2023, continuamos con éxito la implementación de nuestro plan Arval Beyond 2025, con buenos avances logrados en todos los ámbitos: la flota de vehículos eléctricos de batería (BEV), en particular, aumentó un 85% respecto al año anterior y se superó el umbral de 630.000 vehículos conectados», ha asegurado el presidente.