La multinacional francesa ALD Automotive ha comprado la compañía alemana de suscripción de automóviles Fleetpool, que cuenta con una flota de 10.000 vehículos y que está especializada en el proceso digital integral de operaciones a clientes corporativos y particulares.
La compra de Fleetpool por parte de ALD Automotive se explica bajo el creciente foco que han fijado las grandes empresas dedicadas al negocio de automoción en las compañías relacionadas con la suscripción de automóviles en entornos ‘on-line’.
Recientemente, Renault ha anunciado a través de su financiera RCI Bank la compra de la española Bipi, también especializada en el negocio de suscripción de vehículos con un carácter cien cien por digital, si bien Bipi está más centrada en el canal privado.
Renault también ha puesto el ojo en plataformas digitales que también están explosionando en estos momentos, las dedicadas al negocio de vehículos de segunda mano como heycar Group, en la que ha entrado a formar parte de su capital.
En este sentido, ALD Automotive ha mostrado interés en los últimos meses —y banco Santander— por la escindida división digital de vehículos de segunda mano de su rival LeasePlan, CarNext, una suculenta plataforma ‘on-line’ que cerró el año pasado con 40.000 vehículos vendidos a clientes particulares.
https://fleetpeople.es/leaseplan-ald-tapado/
ALD y Fleetpool: disparar la huella digital
ALD Automotive indicó ayer que la operación de compra pretende desarrollar de un modo ágil y rápido sus operaciones de servicios de suscripción digitales para clientes privados, para empresas y también para sus socios comerciales.
En este punto hay que recordar que tanto ALD como sus rivales en el mercado de renting y leasing trabajan también para otras empresas, fundamentalmente entidades financieras, como marcas blancas en el canal principalmente particular.
Fleetpool fue creada en 2008 y es en este momento la firma de suscripción de vehículos digital líder en el mercado alemán. Ofrece diversos modelos de suscripción a sus clientes con packs de servicios alternativos y que se concretan de un modo digital a través de toda la operación, desde la selección del vehículo hasta la aceptación de la operación por parte de la entidad crediticia y la firma digital electrónica.
La operación entre ALD Automotive y Fleetpool está pendiente de aprobación por parte de las Autoridades de Competencia de la Comisión Europea.